martes, 10 de diciembre de 2013

Cine, Noviembre

1- La condición humana I: No hay amor más grande
2- Mal día para pescar, 2009
3- El sabor del sake, 1962
4- Quemado por el sol, 1994
5- Bienvenidos al fin del mundo, 2013
6- El largo y cálido verano, 1958
7- Grizzly Man, 2005
8- Los edukadores, 2004
9- Vidas rebeldes, 1961
10- Pickpocket, 1959

jueves, 28 de noviembre de 2013

Todo es luz

Estoy en una habitación de colores chillones, donde siento que alguien me esta observando. Me incorporo ya que estoy sentado y pongo mi espalda recta, cruzo las piernas para acercarme a una sensación de comodidad que no hallo, que no tengo en estos momentos. Estoy desnudo. Pero no se el porqué. Me contemplo a mi mismo como si no conociese mi cuerpo. Me veo los brazos, parecen difuminarse al paso de mis ojos. Toco mis piernas, parecen las mías, fuertes y robustas, largas y anchas. Paso mis manos por mis pies, los siento rugosos y secos como si hubiese caminado una eternidad. Vuelvo mi mirada hacia la habitación, cambia de color, todos los colores se funden en uno solo. Primero se convierten en negro, en oscuridad, y la luz desparece de mi vista. No hay nada. Solo yo, estoy yo. Ya no me siento observado. Pasa un tiempo aproximado de una eternidad, aunque tal vez sean solo segundos. No lo se a ciencia cierta. Estoy solo yo, el sentido del tiempo no tiene valor para mi. La habitación cambia, parece que me hace una mueca, que sonríe pícara, que vuelve sus ojos hacia mi. Se convierte en blanca, ahora todo es luz, todo brilla en su máximo esplendor. Ya no estoy desnudo, una ropa ligera como brisa tapa mi cuerpo. Miro hacia la derecha y vislumbro una puerta, acto seguido me levanto, acerco mi mano hacia el pomo de la puerta. Y la abro. Puedo salir de la habitación. La habitación me mira con un deje de tristeza, pero es feliz también. Puedo irme. Puedo volver a nacer. Vuelvo a nacer. Fuera todo es luz.

miércoles, 20 de noviembre de 2013

Sitios con encanto, Vigo, segunda parte

1- Bar australiano, situado en la Alameda, en un lugar privilegiado. Muchas cervezas. La pinta de Foster´s sale a tres euros. Se pueden ver varios deportes en sus teles. Decoración típica australiana, es posible que Cocodrilo Dundee vaya a este local cuando venga a Vigo. Buen ambiente. Perfecto para cuando quieras pensar que no estás en tu ciudad.

2- La Pepita, situado en las inmediaciones de la Calle Rosalía de Castro, ambiente innovador, decoración industrial, parecido a los restaurantes neoyorquinos de nuevo cuño. Buena comida, la especialidad son las hamburguesas.


martes, 19 de noviembre de 2013

Así me miras tu

Me estabas comiendo con los ojos, con esos ojos grandes y brillantes, como diamantes sacados de un cuento de hadas, grandes como piedras cavadas por gigantes de otros tiempos.
Me mirabas más allá de mis ojos, me mirabas más allá de mi vida, de mi tiempo, de mi alma. Como si un despertar súbito de mil colores explotaran en mi cara. Y solo dejaran dos cuencas verdes en el lugar que le corresponde a mis ojos. Dos cuencas como bosques infinitos y arroyos cristalinos, como verdes campos yendo al vaivén del viento.
Me sonreías como si hiciese una gracieta de antaño, como en una película muda, como en una vida en blanco y negro. Me sonreías como la primera vez, como si nos estuviésemos conociendo, como si fuésemos extraños cogiéndonos súbitamente de la mano, como extraños que pasan uno al lado del otro en una gran ciudad y ni reparan nada más que en sus propias voces, que las llaman desde su interior, gritan que quieren salir, gritan que quieren escapar, gritan que desean desear a esa persona que ni conocen ni quieren conocer.
Así me miras tu.

viernes, 8 de noviembre de 2013

El huésped

El día anterior fue un día como otro cualquiera, con lluvia en su mente y con luz y sol fuera de su cuerpo, en lo referente al clima estamos hablando.
Llevaba varios días con un dolor sordo y agudo en la parte derecha de su cerebro. Para más inri en la parte derecha de su cabeza, muy cerca de su ojo derecho,
Eso es - dijo el. Le dolía la parte más cercana a su ojo derecho. Había días que le dolía de una manera casi inaguantable, como si hubiese algo que viviese en ese particular lugar de su cabeza, perfectamente situado entre su ojo derecho y su oreja, siempre del mismo lado, claro está.
Había días que le dolía menos, otros más, movía el ojo para intentar descubrir que era lo que le molestaba, que era lo que le afligía.

martes, 5 de noviembre de 2013

Cine, Octubre

1- Vivir (Ikiru), 1952 - Akira Kurosawa
2- Prisioneros, 2013 - Denis Villeneuve
3- Un condenado a muerte se ha escapado, 1956 - Robert Bresson
4- Laura, 1944 - Otto Preminger
5- Siete ocasiones, 1925 - Buster Keaton
6- El repartidor de hielo, 1973 - John Frankenheimer
7- Calabuch, 1956 - Luis García Berlanga
8- El gran carnaval, 1951 - Billy Wilder
9- Cenizas y diamantes, 1958 - Andrzej Wajda
10- Descubriendo a John Cazale, 2009 - Richard Shepard (Documental)

martes, 22 de octubre de 2013

Un rareza

Salgo a tomar el aire. El bar está casi vacío, para ser jueves es un rareza, debería estar atestado. Debe ser que fuera hace un día de perros, no es que llueva solo es que caen chuzos de punta. De esos días que dan casi miedo.
Ella sale a fumarse un pitillo. Me mira con una mezcla de ilusión y tristeza. En su mirada hay desconcierto y esperanza a la vez, debe ser que al verme algo en su interior le ayuda a estar mejor. No es que yo sea un dios totémico, más bien soy un ser cercano. Eso es lo que ella busca en estos momentos de penumbra.
Me comenta que ya no va a trabajar en ese sitio nunca más, que su jefe es un desgraciado. Me lo cita con esas mismas palabras. Ni una más, ni una menos. Que la ha decepcionado. Vaya, le digo yo, otra mujer buena que ha sido decepcionada, la verdad deberían de darnos un buen tirón de testículos cada vez que hiciéramos eso los hombres. Una mujer buena es igual a un ángel sobre esta tierra fea y hostil.
Yo la intento consolar de un modo natural, intentando decirle que va a encontrar algo mejor y muy pronto, pero a cambio solo obtengo una media sonrisa y una mueca triste. No quiero más y no necesito más.
Me encantaría gritarle en ese momento que yo la ayudaría y le daría un futuro perfecto. Un mundo lleno de cascadas de felicidad, llenas de días de miel y noches de luna con forma de queso.
Pero sería falso, así que me callo y la veo partir dentro de su cueva de desesperanza.
Yo miro hacia la fría noche y pienso que es hora de partir.
Emprendo el camino hacia casa con el alma literalmente en los pies pero mi nuevo yo me impide estar triste y me da un empujón de compadreo.
Es lo que tiene tener una buena alma de amiga redentora.

jueves, 17 de octubre de 2013

Un señor solitario

El señor solitario llega a la fuente solo. En una insultante soledad se sienta en un húmedo banco de piedra coronado por musgo reciente a causa de la lluvia caída días atrás. Estoy mirándolo mientras relleno de agua una botella grande de plástico. Le saludo diciéndole hola y buenas tardes, pero hace no escucharme o en realidad no me escucha, que más da digo para mí. Los maleducados son así, vivan en manada o no.
Tendrá alrededor de unos 50 años, gafas graduadas tan corrientes como un bebé bonito, lleva unos pantalones de esos que solo un adulto serio se puede poner, como si su alegría por la vida (si alguna vez la tuvo) hubiese desparecido de pronto un día cualquiera, precisamente ese día que estaba poniéndose esos pantalones. Una chaqueta de un color cercano a la melancolía adorna la parte superior de su cuerpo, un color que oscila entre varios matices de gris, pero ninguno en particular.
Yo sigo a mi quehacer, hoy la fuente echa muy poco, porque aunque llovió hace poco no llenó suficiente el espacio que había que llenar con la caída de las lágrimas de los dioses.
Casi al punto de acabar con mi tarea el señor solitario me habla, me cuenta algo referido al pH del agua y que hoy en día es más importante para todos alguien que sea un sibarita con el agua y que la sepa distinguir. que la misma persona con el vino.
Me voy casi cortando en seco la conversación, un paso cada vez que el me quiere contar una cosa, Hasta que se calla y yo me alejo con el preciado botín del agua en mi poder.
Es curioso que hasta la gente solitaria necesite el contacto aunque sea mínimo por medio de la voz con otro ser humano.

domingo, 13 de octubre de 2013

Del universo y otros lugares

A Pippo le gusta mucho que le hagan cosquillas. Donde más le gusta en su barriguita, donde en vez del inútil ombligo humano tiene una costura en una especie de i griega, con complicidad su amigo Oliver le hace cosquillas y las risas ensordecen la tristeza imperante a varios metros de distancia. Su eterna sonrisa se hace aún más patente cuando los dedos del niño pulsan el botón preciso para que esto ocurre.
A su vez, Oliver también rie, una risa bonita, musical y embriagadora como el vino más rojo y dulce pueda provocar. Hoy es una tarde gris y lluviosa, pero la imaginación de un niño es inexpugnable y clara, y acompañado de su mejor amigo solo pueden salir bien las cosas. ¡qué maravillosa es la vida a veces!
Yo, el narrador omnisciente los veo reír y disfrutar como si el mañana fuese un lugar distante, algún ser sin importancia, un vago sentimiento...
Y en estos momentos me voy a otro lugar donde los niños sigan siendo los seres más luminosos del universo.

miércoles, 9 de octubre de 2013

Un ser cercano

Pippo es su amigo, su compañero, su apoyo...y eso que es un oso. Para más señas un oso inanimado. Si, un oso de peluche. Pero a el le da igual. Su amigo lo escucha, juega con el, le sonría tanto de día como de noche. Es casi perfecto. Solo le falta hablar. Y la verdad es que la mayoría de las veces a las palabras se las lleva el viento y no transmiten todo lo que queremos que transmitan. Son sonidos huecos, faltos de luz la mayoría de las ocasiones. Así que, en este caso, es mejor así.
A Oliver además le cuesta expresarse con las personas, es en el argot lingüístico tímido. Es feliz, puro, bueno. Pero es tímido. Y en este mundo oscuro y feo eso es tremendamente malo. Pero eso ya lo aprenderá con el tiempo...
Por eso su amigo el oso es tan importante para el. Es su mundo. Su mundo encerrado en apenas unos centímetros... Pero la mayoría de las cosas buenas vienen en envases pequeños y en este caso es totalmente verdad.
Y aunque no hable es más importante que su padre para el, que muchos de sus amigos... Y eso es innegociable.
Se le empiezan a cerrar sus grandes ojos verdes y tiene sueño, como acto reflejo abraza a Pippo, ya puede soñar feliz.

martes, 24 de septiembre de 2013

El ausente

Se sienta en la mesa con unas ganas dignas de un rey al querer gobernar. Hay cuatro sillas blancas, cuatro servicios de comida, cada uno con un plato llano, un tenedor, un vaso y una blanca servilleta. Pero en esta ocasión solo hay tres personas a la mesa.
Nuestro protagonista que ronda los setenta años de vida, un joven adulto, y una mujer dulce y buena que irradia luz allá por donde pasa.
El cuarto factor está en su habitación soñando despierto, porque despierto es cuando más nítidos ve sus sueños. Sueños como los de cualquier otro.
Casi siempre las comidas son agradables, copiosas y divertidas. Como deberían ser todas las comidas en este lugar mal llamado mundo.
Pero algunos días, los menos, son un suplicio digno de cualquier drama mal escrito de película de sábado por la tarde.
Nuestro protagonista, pongamos que se llama el señor Limón, pregunta dónde está esa otra persona que ha dejado desierto su sitio.
La mujer que irradia luz le responde que está comiendo fruta en su habitación. Y aunque al señor Limón no le gusta mucha la respuesta, ya que hace un gesto de disgusto, pero pronto cambia de rictus y sigue con su comida.
La señora luminosa hace de intermediario en está tensa y conflictiva relación y la persona que no está en esos momentos ante la mesa de lo agradece profusamente, él ya sabe que a ella también le cuesta responder a esas preguntas sin sentido, a esos silencios incómodos, pero al contrario que el ausente ella sabe leer la vida como un escriba milenario del Antiguo Egipto.
El ausente sigue con sus pensamientos un poco más, con sus aventuras mentales, y con sus placeres metafísicos.
El ausente vaga por mundo de luz y donde lo imposible es lo más factible por vivir.
Y, como siempre, le reza a la señora luminosa para que esté con el toda la vida.

lunes, 23 de septiembre de 2013

El Oeste

-Papá, ¿el Oeste está muy lejos?
Su padre desde las alturas la miró perplejo, y a continuación las risas de sus progenitores estallaron ante su maravillosa ocurrencia.
-Hay que ir en barco. Imagínate lo lejos que está - le respondió
La mirada de la niña denotaba admiración, asombro y felicidad a partes iguales ante la figura de su padre.
Unos instantes después hizo lo que hacen los niños: seguir jugando y explorando el mundo. Era momento de irse a casa a descansar, mientras el sol se estaba ocultando al fondo de los altos y verdes árboles como si le implorase a la niña que jugase al escondite con el sólo un ratito más.

Los niños son increíbles (en este caso una niña con dos simpáticas coletas prendidas con sendas gomas amarillas) tienen una cantidad inimaginable de magia en su interior.
Es increíble que al crecer y convertirnos en esos aburridos sujetos llamados adultos, casi toda esa magia haya desparecido de nuestro interior.
Esto es importante, hay que dedicar uno segundos al día, cada día para sentarnos a charlar con ese niño que un día fuimos.

Y así saber dónde acertamos.
Y lo más importante: dónde nos caímos y no nos volvimos a levantar.

viernes, 13 de septiembre de 2013

Algo fugaz

Encontrarse a si mismo perdido a través de un espejo mientras buscas tu sonrisa perdida en algún rincón,
Hallar de por sí una piedra olvidada para si poder convertirla en un nuevo corazón,
Distinguir uno a uno tus verdaderos amigos que juegan contigo para siempre y un millón
Perderse si acaso un beso olvidado para así poder encontrar redención.

Y saber que te sientes un perro cualquiera buscando un compañero, un amigo, un guía
Y creer que no has sido defraudado ni siquiera un instante
que al salir naufragante tu corazón al latir
Y vivir sin salir de tu asombro constante
por todo lo que has dado sin fingir
Y saber que saldrás victorioso una vez más
Aunque solo sea una victoria fugaz

Joder

Es triste hacer siempre la misma vida triste. Es decir, despertarte a las tres de la tarde, lo primero que piensas al levantarte es en la nicotina. Solo en eso, bueno a veces en algo más pero simplemente no te interesa lo más mínimo. Bueno, muchas veces piensas en como hacer más jodida la vida a los demás. Pero ese es otro asunto.
Joder la puta vida a los demás.
No a los demás que no están cerca tuya.
Si no a los que están muy cerca tuya.
Hay burros, necios y después está este jodedor profesional. Si, jodedor.

jueves, 12 de septiembre de 2013

A cualquier corazón

Siempre se había pasado la vida a medio gas, al trantán, sin arriesgarse a nada, sin identificarse con nadie, sin quererse nada. Pero siempre hay heridas mortales que sanan por la mañana pero vuelven a abrirse por la noche. Que se olvidan de ti por un momento pero retornan a ti sin contemplación: ¡pum! y te mandan al infierno más lejano. Lo más doloroso del asunto es esperar siempre lo mejor y saber que nunca va a llegar, de perdonar lo imperdonable por el simple hecho de querer a la inmensidad del mundo tal y como es. Y las cosas no son así. Todo tiene un color, un matiz, unas circunstancias... todo mezclado forma un elemento único. Y claro, si dos cosas están bien formuladas pero la tercera no el producto es inestable, malo, podrido, feo, muerto...
Y esta persona sigue sin ver el final del túnel, solo ve oscuridad en los más recónditos cajones de su alma, y solo ve desdicha en esas lágrimas que brotan en cualquier momento y cualquier lugar de su corazón herido y maltrecho, quemado y olvidado en el fondo de cualquier armario lleno de polvo.
Solo espero y con ansia lo espero, que cuando vaya a recoger a su corazón para enseñarle senderos de luz, el polvo no haya desaparecido o ennegrecido a su corazón...

Una página arrancada

Debería existir un saco que cada persona llevase consigo, mejor dicho, un pequeño saco. Para ver las buenas acciones y las malas, cuando existiesen más buenas acciones que malas el saco estuviese lleno, y cuando fuese al revés. Pues eso, vacío.
Ya se que en este mundo no existe el karma, no existe casi el bien, y si existe casi en su totalidad todo lo relacionado con la palabra mal.
Yo no soy una persona ejemplar en casi ningún aspecto de la vida pero soy una persona buena. ¿Porqué? Porque mi saco está siempre (¡siempre!) más lleno que vacío.
Esto no es una queja y menos una súplica (nunca se puede suplicar a gentes necias y obtusas), pero a ver cuando este mundo de mierda cambia, en serio, a ver cuándo.
Hay que arrimar el hombro, mejorar cada día, ayudar al que está a tu lado, no cerrarse a nada, abrirse a otras realidades, ser feliz.
Porque ser feliz es muy difícil. Yo llevo casi 30 años intentándolo y son muy pocas cosas las que me producen esa libertad total, esa conjunción con todo, sobre todo con mi persona, por ejemplo: hablar con mi madre, ver la sonrisa de felicidad de mi hermano, ayudar a alguien...
Y la verdad he recibido muy poco a cambio por todo lo que he hecho a lo largo de casi tres décadas y ojalá vuelva algo bueno de eso a mí, porque mi paciencia no es infinita y mi aguante ya no es inaguantable

viernes, 31 de mayo de 2013

Esos falsos profetas

Los malos amigos son como esas ofertas del supermercado que si no te interesa una siempre puedes elegir una mejor.
Peleas por ellos. Les dices las cosas claras como un mar perfecto y se las dices a la cara como debe ser.
Y cuando en un momento remoto de tu existencia quieres pasar un rato con ellos, simplemente se hacen los locos, desaparecen.
Hay una persona sabia a su manera, más loca a su manera... Y me ha repetido esta cantinela que a continuación os cuento: "Los amigos no te van a dar nada en esta vida. Cuando necesites de ellos, no van a estar" Joder, que asco que tenga razón. Pero siempre hay personas más curtidas que nosotros en todos los diversos temas que conlleva esta travesía pasajera llamada vida..
Pues eso, siempre existirá el momento de seleccionar, de ser un embudo. Solo las cosas buenas. Solo las cosas importantes. Solo las cosas únicas.
Es momento de elegir..

jueves, 16 de mayo de 2013

Nadie quería jugar con el

Hace mucho, mucho tiempo atrás cuando los dulces eran divertidos y los niños buenos, había un sol en un mundo triste y oscuro. Ese sol salía cada mañana y se ponía cada tarde para ayudar a la gente a ser más feliz, a encontrarse con ellos mismos, a que cantasen y bailasen en días de lluvia y en mares tranquilos.
Pero nadie quería jugar con el.
Y lo intentaba, lo intentaba con mucho ahínco cada día más ilusionado, cada día más amable.
Pero nadie quería jugar con el.
Un día todo eso cambió porque encontró una niña bonita a rabiar, bonita a más no poder. Se llamaba Saeki y como nuestro amigo el sol no tenía amigos. Nadie entendía su precioso e inmenso mundo. Solo tenía cinco años. Qué iban a saber esos aburridos y estresados adultos.
Se hicieron muy amigos y ella le dijo que cuando fuese mayor se casaría con el. Que estarían juntos toda su vida. Todas las vidas.
Eso hizo muy feliz a nuestro protagonista.
Ella al crecer no fue como esos grises y adustos adultos.
Fue especial. Era especial. Siempre lo fue.
Se convirtió en una preciosa luna.
Y para siempre alegraron un poco la vida y los corazones a todos los que soñaban con ellos.

Pero esa es otra historia..






                                                   Para Lupe

lunes, 15 de abril de 2013

A los que ya no están

Yo, que estaba destinado a las más altas cumbres.
Yo, que tuve, tengo y tendré la tecla exacta para ser un ser inmortal.
Yo, que hace años que no me hallo.
Hace años que un corte profundo y certero podría ser un signo de inmortalidad.
Un signo de inmortalidad no es permanecer en el pensamiento de la gente, es permanecer en el corazón de las personas.
Es permanecer en el alma de todo el que has querido. Y lo más importante de todos los que te han querido.
De todas esas personas, de todas esas gentes, que por pasar un segundo contigo. Un instante contigo. Un segundo contigo. Una vida contigo:
Darían su propia vida.
Como tu has dado cada segundo por ellos, cada gota de tu corazón, cada lágrima esencial; sea de felicidad o de tristeza.
Ese algo esencial que sin "eso" sería una pérdida vivir la vida. Pelear con la vida...






                                                         A Claudio, un caballero.

lunes, 28 de enero de 2013

Natural

El habla con duendes. No habla con su hijo pero habla con duendes. Por lo menos eso es lo que dice él. Se lo dice a su mujer. Con su hijo ni una palabra y cuando la dice es una palabra sin sentido e hiriente. Le jodieron la vida, según el, cuando era pequeño porqué no va a joderle la vida a sus hijos.
Para el es un proceso natural.
Como comer, respirar o fumar. Algo intrínseco, algo que por un motivo y otro hay que hacer. Unas veces el cuerpo le pide esto otras veces su cuerpo le pide aquello. Todo muy natural.
Y es verdad, la mayoría de los locos no están donde deberían. La gran mayoría de los locos están en el mundo real matando mujeres buenas, violando mujeres buenas, y robando a su propio pueblo; por decir algunos tipos de locuras del día a día.
Y están en la realidad, no babeando y gritando contra cuatro paredes acolchadas creyéndose Napoleón, Lenin, o Gandhi. Ojo, que son distintas locuras. Y es mejor creerse un enano chauvinista megalómano que un asesino real...
El mundo fue y será una porquería rezaba el tango. Y la culpa no es del mundo, el está girando y girando y dándonos cosas maravillosas por doquier.
La culpa es de los que creen que no están locos pero hablan con duendes.
Y no con sus propios hijos.

jueves, 10 de enero de 2013

Una vuelta de hoja

Mi corazón herido ya no quiere escapar
ya no se halla perdido en un mar de adversidad
mil flechas taladraron sin cesar
ya no existe un solo hueco capaz de traspasar
me voy con mis poemas a un lejano lugar
donde tu no me alcances con tus palabras de dolor
he encontrado entre la niebla el amor
he encontrado entre la lluvia un refugio
nadie te llorará cuando no estés
aunque yo te visitaré para que me veas triunfar
a pesar de tu inquina, a pesar de tantas cosas
te daré un millar de oportunidades para resarcirte
tu nunca me tenderás la mano
y gritarás con furia cuando tendrías que haber hablado con calma
es una batalla que has perdido sin siquiera lucharla
será mi triunfo cuando en el último momento
sepas lo equivocado que estabas
Y te dolerá mas en un instante que a mi
en millones de momentos
Ya que nunca habrá una vuelta de hoja